martes, 24 de septiembre de 2019

'Habría que hacer un festi en el Valle de los Caídos'

Dos grandes fuerzas se unen para crear una Fuerza nueva. Una del flamenco fusión más novedoso, el Niño de Elche, la otra del indie más primigenio, Los Planetas. El pasado jueves nos citaban a los medios en la sala El Sol para presentarnos a la nueva criatura. Francisco Contreras (el Niño de Elche), Paco para los amigos, inicia la escucha con Santo Dios, la canción que propició la unión de estos mundos tan diferentes y a la vez tan dados a experimentar y fáciles de mezclar.

"Hablando, nos dimos cuenta de que la música que nos gustaba coincidía: música popular e himnos de Andalucía y empezamos a trabajar juntos" nos confiesa Paco y desvela que "Jota no quería cantar, pero al final accedió". Juan Mario Vázquez, un colaborador en común, fue el que les invitó a probar juntos a hacer un single, un trabajo que nació sin nombre y que al final se convirtió en este proyecto tan provocativo. El libro-disco saldrá a la venta, de forma intencionada, el 12 de octubre. Para escuchar canciones como El Novio de la muerte, himno de la Legión, no había mejor oportunidad de lanzamiento que el día de la Hispanidad.

viernes, 6 de septiembre de 2019

El Gigante supera su carrera de obstáculos

¿Cuándo llega un festival a su madurez o a convertirse en un clásico del panorama musical? No sabemos cuáles son las claves, pero está claro que el Festival Gigante este año ha conseguido sobrevivir, superando la adversidad, a una sexta edición con muchos impedimentos.

La incertidumbre de no tener ubicación exacta hasta apenas un mes antes y la denuncia de Facua por no permitirse la entrada de comida al recinto prometían polémica y que el Gigante pinchara en esta ocasión. Tras esta carrera de obstáculos, el resultado ha sido de menor afluencia, pero sin lugar a dudas todo un éxito en lo musical.  A pesar de no haber una gran estrella que inflara la taquilla, la elección de los grupos emergentes ha sido un acierto, y 19.000 asistentes disfrutaron de ellos, habiendo una reducción de tan solo 1.500 festivaleros con respecto de la edición anterior.