sábado, 17 de marzo de 2018

Los primeros selfies de van der Elsken

El autoretrato con el móvil que está tan de moda en los últimos años, podría tener un posible precursor en Ed van der Elsken. Y es que este holandés atraído por los retratos, no dejaba pasar una ocasión para autoenfocarse con sus modelos, incluso sin ellos, él solo en el cuadro. En la sala Mapfre de Santa Bárbara de Braganza tenemos la oportunidad de ver el resultado de sus más de 50 años de profesión. Este fotógrafo ha dado la vuelta al mundo como espejo de las calles. Una de las sociedades más reflejadas ha sido la de su Ámsterdam natal, sin olvidarnos de sus años en París y sus viajes a Tokio. Siempre capturando a "su gente", los personajes más originales y genuinos de cada zona como propio reflejo de sí mismo y su identidad.


Van der Elsken utiliza su cámara como medio de expresión, exteriorizando su propio universo interno, ya sea mediante el selfie o el retrato de iguales. Todo ello con un gran sentido de la empatía y la solidaridad que se vislumbra en su trabajo, imágenes sobrias y emotivas. Además, en esta retrospectiva, la mayor que se ha hecho de él en nuestro país, se incluyen otras disciplinas en las que experimentó, como los fotolibros o el video.

Una de las obras audiovisuales rodada en Ámsterdam recoge escenas a modo voyeur, introduciéndose en el hábitat de sus presas con sigilo para tomar sus acciones sin alterar su naturalidad. Pasando inadvertido conseguía la esencia de sus personajes, que se veían sorprendidos cuando se percataban del ojo indiscreto que les había estado robando su intimidad. Se puede palpar toda la intención y actitud de sus modelos con el lenguaje no verbal y las escenas, cotidianas, se llenan de una belleza y plasticidad admirable.

También podemos ver sus fotolibros, maquetas de sus publicaciones, hojas de contactos y bocetos que permiten comprender su metódico trabajo. En la edición de los libros experimenta varios tipos de sangrado y la combinación perfecta de las imágenes introduciendo varios tamaños y posiciones de las mismas.

Puedes pasear entre holandeses, parisinos y tokiotas en esta sala de exposiciones que siempre acierta con sus apuestas expositivas de fotografía, hasta el 20 de mayo, no lo dejes para el último día, porque quizá quieras volver a ver a estos personajes tan curiosos y entrañables, incluso, imaginarte que has salido de Madrid.


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